Uno de los principales temas al comenzar marzo es como volver a las rutinas, horarios, deberes y tomar las responsabilidades que abandonamos por el periodo de descanso etc. Si para un adulto es complejo, imagine cómo será para los niños y niñas.
Pero como bien sabemos el volver a clases es recuperar una rutina, no es aprender algo nuevo, por lo tanto esta información ya está guardada en nuestra mente y es más fácil acceder a ella que empezar desde cero.
Hay que entender que todos los procesos de adaptación llevan tiempo, y como somos todos distintos a algunos nos toma más tiempo que a otros, es importante el respeto por los tiempos de los otros y tener paciencia como padres.
¿Cuándo y cómo comenzar con los cambios?
Mientras más pronto mejor, estamos a pocos días de la vuelta al colegio o al jardín. Siempre debemos organizar la casa, que el ambiente vaya propiciando este lugar ya conocido y realizar pequeñas tareas que nos beneficien a todos:
- Organizar las agendas de cada uno de los miembros de la familia
- Ir priorizando las actividades, ya no será el juego la principal actividad del día
- Hacer parte de los procesos de inicio escolar a los niños, que acompañen a hacer las compras, organizar sus útiles, organizar el espacio que designarán para sus actividades escolares, ver sus uniformes etc.
Cambiar las horas de dormir: una de las tareas que más cuesta es dormir temprano, para esto es necesario comenzar a adelantar progresivamente las horas, recordar que los niños y niñas necesitan horas mínimas de descanso, y por lo tanto, al hacer esto comenzar a levantarlos más temprano.
- Cambios en la alimentación, respetar los horarios de las comidas y apoyar con alimentación más saludable que la “permitida” en las vacaciones
- Contactar a algún compañero del colegio para generar mayor motivación, el volver a encontrarse y contar las vacaciones genera el deseo de volver al colegio.
- Generar algunas rutinas de deberes en el hogar, para fomentar la responsabilidad de sus propias actividades.
- Usar frases positivas en donde puedan ver el colegio como un beneficio y no una amenaza, si no les fue bien, enfoquémonos en apoyarlos y ver este nuevo año como una oportunidad.
¿Qué otros tips pueden dar a las otras familias?
Natalia Araya Olguín
Psicóloga Clínica Infanto Juvenil
Terapeuta Floral de Bach Contacto: narayaolguin@gmail.com