Verano se relaciona con vacaciones, sin importar la cantidad de días que sean, la idea es tener días de desconexión, energías nuevas, vida social activa, conocer nuevas personas y ¿por qué no? Tener un amor de verano.
El verano permite este destape de emociones, dejar de pensar y calcular mucho, que todo fluya un poco más y permitirse mostrarse como es, sin preocupaciones con una disposición a pasarlo bien, generando espacios para conocer nuevas personas, nuevos tipos de personalidad, que quizás nunca se esperan en la vida diaria.
El verano entonces permite volver a conectarse con uno mismo, reconocer el cuerpo, despertar la libido, permitir aventuras gracias a las hormonas que están más despiertas. Todo esto se da gracias a las actividades nuevas, como andar en bicicleta, paseos largos de caminatas, deportes, fiestas, etc. que nos permiten estar en contacto también con otros.
Todo esto propicia un amor de verano, donde la conquista, el enamoramiento, las mariposas en el estómago fluyen naturalmente, generando espacios con este amor para estar el tiempo libre, conocerse rápidamente, vivir experiencias nuevas, intensidad en la relación, sin prejuicios y con libertad.
¿Qué beneficios tiene?
- Puede ser un compromiso provisional, que no requiere mayor preocupación ni proyección, estableciendo confianza en que será un amor de verano.
- Aumenta la moral, autoestima y ego, generando una mejor salud física y mental.
- Aumenta la creatividad y comunicación directa, espontánea y fluida.
- Fomenta la confianza en uno mismo, permitiendo ser más espontáneas, menos tímidas, cambiar actitud y ser más decidida.
¡Alerta de Verano!
Generar falsas expectativas e ilusiones de que todo será color de rosas, que lo que se proyecte será igual.
El tiempo cambia, ya no se tendrá tanto tiempo para verse, al volver a la hay otras actividades y las prioridades también son distintas
Resolver como continuará esta relación, qué cambios hará cada uno y si se está dispuesto a hacer esto en beneficio de la relación
No dejar que el ánimo se vea alterado, no desanimarse y sacar lo mejor de esta “relación”
Y tú, cuéntanos …
¿Cómo ha sido tu amor de verano?